Munich está orgullosa de conservar sus tradiciones y fiestas populares. Refleja, más que ninguna otra, la imagen de lo que es típicamente alemán.
Para ser sincera, están orgullosos de todo lo que lleve la marca Alemania y después de conocer este país, podrían tener razón.
Es inevitable hablar de una de sus fiestas más populares, a las que acuden cada año unos siete millones de visitantes : la Oktoberfest , ( fiesta de octubre ).
En estos mismos momentos se está celebrando, comienza a finales de septiembre y termina el primer fin de semana del mes de octubre.
Se viene festejando todos los años, desde 1810, año en que el rey Luis I de Baviera, el rey constructor, contrajo matrimonio con Teresa de Sajonia, celebrando la boda en una pradera, llamada desde entonces «Theresienwiese«, con una gran fiesta a la que estuvo invitada toda la población.
Emociona ver a sus habitantes con el traje típico de la región: sus hombres vistiendo pantalón corto de cuero y sombrero, adornado con una pluma; y sus mujeres, muy femeninas, con sus blusas blancas, faldas amplias y delantal.
Pero todo el año se puede beber cerveza, «el pan líquido«, acompañando a las inefables salchichas , – ¿ será verdad que sólo se comen antes de las once de la mañana ?-, para reponer fuerzas, en cualquiera de las biergarten que hay en la ciudad.
La cervecería de la corte, Hofbräuhaus , es la más famosa.
Hay que tener en cuenta que la «ley de la pureza» de 1517, prohibe añadir cualquier sustancia química o natural, que no sea agua, levadura, lúpulo y cebada. Al no incluir conservantes, no está permitida su exportación. Sólo es posible probarla en Munich.
Una excusa para darnos otra vueltecita por esta cálida ciudad…
Alicia N.Rivara
Imagen de portada : Oktoberfest bierzelt , de Gutsul. Bajo Licencia CC share alike 3.0. GNU