Seguimos nuestro viaje por tierras suizas en Lucerna ,para después adentrarnos en las cataratas del Rhin y en el Monte Pilatus.
Lucerna.
Aquí comenzó la Confederación Helvética; es un enorme lago en forma de pulpo, un río cruzado por puentes medievales de madera; un conjunto de calles peatonales de antaño, buenas terrazas para tomar café con vistas a los Alpes y su enorme pirámide rocosa – el monte Pilatus – que proyecta su sombra. Cisnes y patos por sus riberas, una muralla con ocho torres, todas distintas, cerrando el conjunto y la sensación tan suiza de que nada puede funcionar mal. ¿ Es que se puede pedir más?
Y en nuestro viaje vamos a descubrir las cataratas del Rhin y el Monte Pilatus.
Desde Zurich podemos acercarnos a contemplar las cataratas más grandes de Europa: 20.000 litros de agua por segundo cayendo desde una altura de 30 metros. Conviene acercarse lo más posible a los pies de la cascada y dejar que nos invada cierta maravillosa sensación de vértigo e inestabilidad. Un fenómeno delicioso de comprobar.
Y, finalmente, el monte Pilatus. Desde Lucerna es una de las excursiones más emocionantes y emotivas que podemos realizar. Se comienza con una salida de 45 minutos por su cara sur en el tren cremallera más inclinado de Europa – hay momentos de un 50% de pendiente-, y con más de 100 años de historia !.
Arriba se tiene una vista que no se puede adjetivar, hay que sentirla: trescientas montañas, glaciares perpetuos, valles profundos con lagos en su interior, la meseta suiza. El tiempo pasa sin sentirlo… uno se queda petrificado ante el increíble panorama. Después queda la bajada por su cara norte en un teleférico y telecabinas, recorriendo hermosos bosques y con la fantástica vista del lago y la ciudad de Lucerna a nuestros pies.
Imagen de portada by Tobi 87 [GFDL], via Wikimedia Commons
