Siguiendo la Ruta de San Pablo por Grecia , ahora llegamos a la región de Kavala

Esta región griega destaca bajo Filipo de Macedonia (359-336 .A.C.) y sobre todo durante el reinado de Alejandro Magno (336-323 A.C.), posteriormente cayó en decadencia al ser repartida por los generales de Alejandro, pasando después a manos romanas.

En el segundo viaje misionero de Pablo de Tarso en sueños vio a un macedonio suplicándole que evangelizara en su país. Pablo se dirigió allí, predicando por primera vez en Europa.
Destacan una serie de ciudades en esta región entre las que podemos hablar de Amfípolis, Filipos, Kavala, Veria y por supuesto Tesalónica.

Amfípolis fue una ciudad de la antigüedad griega, junto al río Estrimón, al oeste del monte Pangeo. El lugar en el que estaba esta ciudad lo intentó colonizar Aristágoras de Mileto en el 497 a.C. Trató de asentarse en Mircino de Tracia, ciudad junto al río a unos siete kilómetros de Anfípolis., pero murió luchando contra los tracios edones.
Hacia 465 a.C. los atenienses enviaron a Sófanes, pero también acabaron con la expedición los tracios edones en Drabesco, colonia ateniense fundada en el 437 a.C. por Hagnón, hijo de Nicias.
En el importante yacimiento arqueológico de Amfípolis, puede encontrarse el famoso “León de Anfípolis” , escultura funeraria del siglo IV a.C. y varias tumbas tracias abiertas, que se conservan bastante bien. También es visible hoy en día parte de la muralla exterior de la antigua ciudad.

Filipos, es la primera comunidad de Europa fundada por San Pablo. Hacia el 50, tras la separación de Bernabé, Pablo escoge a Silas como compañero. Atraviesan Siria y Cilicia consolidando las comunidades. Llegan a Derbe y Listra.
Los hermanos hablaban muy bien de Timoteo, y Pablo decidió llevarlo con él. Comunicaban por todas partes las decisiones del concilio de Jerusalén. Atravesaron Frigia, Galacia y Misia, y llegaron a Tróade. Allí es donde a Pablo se le apareció el macedonio suplicándole. “Pasa a Macedonia y ayúdanos“.
Fue el lugar del encuentro de Pablo con Lidia y su conversión. La comunidad de Filipos nació en un grupo de oración formado por mujeres. Pablo escribió la carta a los filipenses desde la cárcel, quizá desde Efeso; los filipenses tenían una relación especial con el apóstol. Los llamaba “hermanos míos queridos y añorados, mi gozo y mi corona“, agradeciendo la ayuda recibida. 

Kavala, capital de la zona, conserva importantes vestigios de otras épocas. Destaca su fortaleza visible desde diferentes puntos pero al llegar al centro histórico sus calles son pequeñas y sus pintorescas casas están organizadas sin ningún tipo de orden arquitectónico. Destaca su castillo del periodo bizantino. Su acueducto construido por Soleimán el magnífico en el siglo XVI, su magnífica playa, o las montañas que rodean a la ciudad.

Colonizada hacia el siglo VI a.C. la llamaron Neápolis, gracias a las minas de oro prosperó, convirtiéndose en el puerto de la ciudad de Filipos. En el 168 a.C. obtuvo el status de civita romana. Kavala fue parte del imperio Otomano desde 1371 hasta 1912.

Veria, segunda ciudad en el centro de Macedonia después de Tesalónica, construida en las laderas del monte Vermion. Muy cerca de la ciudad se encuentran las ruinas del palacio Vergina (época de Filipo y Alejandro Magno). Durante 154 a.C. fue dominada por los romanos hasta que en el 54 d.C. Pablo pasó por aquí y trajo la Cristiandad. Veria formó parte de Grecia en 1912

En el gran túmulo de Vergina, que el profesor Manolis Andronikos descubrió en 1977 , se encuentran las sepulturas del rey Filipo II de Macedonia, padre de Alejandro Magno, y de sus siete mujeres y la inmensa riqueza que en ellas se almacenaba, actualmente en el Museo Arqueológico de Tesalónica.

Imagen de portada: León de Anfípolis , autor Vlahos Vaggelis. Licencia  CC BY-SA 3.0.

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