El monte Scopus o Monte de los observadores, geográficamente es un lugar privilegiado para tener una vista de Jerusalén. Antiguamente era un estratégico emplazamiento militar, posteriormente Vespasiano lo eligió para instalar su campamento antes de atacarla. Y en el siglo XX, las tropas británicas lo utilizaron como observatorio desde el que controlar la ciudad.
Hoy en día alberga la Universidad Hebrea, con 20.000 alumnos estudiando en su campus universitario. Pero para nosotros es el anfiteatro a la ciudad, es una magnífica estampa de presentación de la Jerusalén imaginada.
Cualquier peregrino primerizo que quiera tener una impresionante y emotiva vista de Jerusalén, lo primero que ha de hacer es ir al Monte Scopus, y desde allí observar la Jerusalén de los siglos. Si es de día podemos distinguir, la muralla, la puerta dorada, las Cúpulas de las Mezquitas, incluso el Santo Sepulcro y San Salvador, pero si conseguimos ir de noche veremos la Ciudad Dorada en todo su esplendor. Y nos dejará una huella que nos obligará a repetir cada vez que volvamos a Tierra Santa.
La ciudad tantas veces soñada e imaginada se presenta ante nosotros, a nadie deja indiferente. Es el momento de brindar y confraternizar por Jerusalén, por nosotros, por todos.
Imagen de portada: Old city from mount Scopus , by Joe Freeman. Licencia CC BY-SA 2.5