Vamos a dedicar el post de este mes a un destino que contiene todos los ingredientes que un viajero puede anhelar: Escocia.  Si no lo conoces aún, puedes unirte a nuestro viaje de este mes de julio.

Comenzaremos  con la ciudad más famosa de Escocia : Edimburgo. Perderse por sus sinuosas calles, jaleadas por castillos y mazmorras, museos , antiguos pubs es una experiencia que nos traslada inmediatamente a un lugar ancestral, que nos parece conocer por leyendas y películas, una especie de dejâ-vu.
El Castillo domina toda la ciudad presidiéndola desde una gran roca volcánica, alberga las joyas más antiguas de la corona británica.
Y si quieres vistas más impresionantes sube a Arthur´s Seat en Holyrood Park, en los restos de un antiguo volcán. Hasta los cementerios de Edimburgo tienen un encanto especial, que nos retrotraen al romanticismo más gótico.
La calle más famosa de la ciudad es la Royal Mile que comunica el Castillo con el Palacio de Holyrood, y dio nombre a la milla escocesa, porque mide eso: unos 1814 metros , paseando entre bellos edificios.
La Galería Nacional Escocesa , con sus pinturas impresionistas de Monet o Gauguin y también renacentistas , Picasso, etc , merece echarle una visita. Y por supuesto saborear el famoso whisky esocés en alguno de los míticos pubs o ,para los más noctámbulos, hacer una ruta nocturna por las calles y mazmorras para rememorar las antiguas leyendas de terror y crónicas criminales.
Pera los aficionados a Harry Potter están de enhorabuena, ya que está muy presente y tiene su propia ruta turística. JK Rowling se inspiró y escribió aquí la saga.

Tras esta estancia inolvidable en Edimburgo , saldremos ya hacia las sorprendentes Tierras Altas. El río y lago Ness serán nuestro testigo, un crucero por el misterioso lago Ness, nos dará la ilusión, a los que crean, de quizás poder atisbar el famoso monstruo, algunos de nuestros amigos viajeros dicen haber sentido su presencia.

Aprovecharemos para visitar otro castillo a la orilla del lago, el Castillo de Urquhart, y al pie del lago nos alojaremos esa noche, que promete fuertes emociones .
Seguiremos por las Tierras Altas en los inhóspitos parajes del Wester Ross. Pero estos parajes esconden tesoros como los jardines de Inverewe , con plantas tropicales gracias a la benigna corriente del Golfo y cascadas.
Otro de los hitos de este viaje son las islas Hébridas, de las cuales visitamos la isla de Skye: envueltos por una naturaleza virgen impresionante, cascadas , los acantilados de Kilt Rock y el encantador pueblo de Portree.

Otro de los puntos fuertes del viaje es el famoso monumento a William Wallace, héroe nacional de la primera guerra de independencia escocesa, a finales del siglo XIII . Con su torre de 67 metros de alto. Sí , es el héroe que encarnó Mel Gibson en la oscarizada película Braveheart.
Está ubicado en la histórica ciudad de Stirling, con su fabuloso Castillo, testigo de innumerables batallas y la Iglesia de Holy Rude.
Terminamos esta ruta en la capital Glasgow, dinámica y animada, con una imponente catedral.
Nos quedarán, además de estas vivencias, para siempre como recuerdo la hospitalidad y buen humor de los escoceses

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